Comentario
CAPITULO XI
Principio y origen del señorío y reinos de Tlaxcalla, y de
los primeros fundadores
La primera fundación fue la cabecera de Tepeticpac, la cual fundó y pobló el único señor y rey, llamado Culhua Quanez, primer señor de los teochichimecas, que quiere decir tanto como, "divinos chichimecas texcaltecas", venidos de las partes del Poniente en cuanto a nuestro centro, de muy lejanas partes desde las Siete Cuevas, pasando grandes desiertos, montañas, ríos, ciénegas y otros trabajos y peregrinaciones. Sucedió a Culhua Quanez en su señorío Atexcalihuehue; a éste, Pantzintecuhtli; a éste, Cocotzin; a éste, Teixtlacohuatzin; a éste, Umecatzin, el cual murió en una guerra contra los mexicanos. Y sucedió en su señorío Tlehuexolotzin Tlacazcallitecuhtli y reinando éste en su cabecera con felice estado llegó Cortés, en cuyo tiempo se conquistó y ganó la tierra. Por muerte de Tlehuexolotzin, sucedió en la cabecera D. Gonzalo, su hijo, [llamado] Tecpanecatl Tlachpanquixcatzin; y a éste, D. Francisco de Mendoza, su hijo, que es en nuestros tiempos.
La cabecera de Ocotelolco. Llegados que fueron los teochichimecas, segundos pobladores de estas tierras y de las provincias de Tlaxcalla, según sus historias antiguas, porque echaron de ellas a los ulmecas y xicalancas, luego que Culhua Quanez pobló en Texcalticpac, partió con un hermano suyo e hizo división de la tierra nuevamente poblada y ganada, dándole el señorío de toda la mitad de ella para que poblasen sus parientes, amigos y comilitones suyos, como en efecto pobló con gran pujanza y poder, poniendo sus leyes y estatutos como señor absoluto y poderoso, el cual fue llamado Cuicuitacatl, haciendo su fundación en Ocotelolco, en la casa llamada Tecpan, que quiere decir "los palacios reales y casa del señorío". A éste sucedió Papalotl; a éste, Culhuateyohualminqui. Todos estos vivieron poco tiempo y al fin vino a suceder en esta casa de Tecpan Ocotelulco Acatentehuatecuhtli Tlatohuani, que siendo muy viejo, y habiendo reinado dichosamente más de cincuenta años, y siendo de más de ochenta, por envidia conspiraron contra él y lo mataron en voz de que era tirano por usurpalle su señorío. Después de muerto, causada gran turbación en la República sin entender la causa por que tal cosa sucedía [y] andaban las gentes aturdidas sin saber que hacerse y las mujeres y niños daban grandes alaridos. Los matadores y tiranos que tal crimen cometieron presentándose en su casa so pretexto de visitalle, le dieron muerte a porrazos, como díchose ha, prendieron a sus hijos, hijas y mujeres y cuanto haber pudieron de su generación hasta la cuarta y quinta, y a todos los pasaron a cuchillo. Con todo, escaparon algunos niños de cuna, hijos de Acatentehuatzin, que hoy viven y son respetados por señores, aunque pobres.
Hecha esta crueltad y tiranía, los señores de la casa de Texcalticpac acudieron al socorro y venganza de esta maldad [con] algunos amigos y deudos; mas por no derramar más sangre patricia de la que se había derramado, considerando que lo hecho no tenía remedio sino aplacar los negocios pasados, se dispuso que quedase el señorío en Cuitlizcaltecuhtotolin, por cuyo nombre se llamó la casa de Cuitlizco. Este vivió como un año en el señorío y le sucedió Xohuatecuhtlimemeloc. Los que conspiraron contra el señor Acatentehuatecuhtli eran advenedizos de Cholollan, recibidos por huéspedes de este señor como deudos y parientes suyos que habían quedado poblados allí. Les hizo amistad y como fuesen gente belicosa que no se contentaba con poco, procuraron con halagos pasarse a esta provincia con el ánimo ambicioso de enseñorear esta tierra, y con dádivas, mañas y buenas astucias ganar la voluntad de muchos perversos para poner en ejecución sus odiosos propósitos, como lo hicieron. A Xohuamemeloc sucedió en el señorío Tlacomihuatzin, el cual tiranizó de todo punto el señorío de Tecpan Ocotelolco y lo gobernó en paz sin ninguna contradicción, siendo rey y señor absoluto de toda la cabecera de Ocotelolco. A éste sucedió Macatzin Chichimecatl Tecuhtli, y a éste Maxixcatzin, su hijo, en cuyo tiempo llegó Hernán Cortés. Sucedióle en el Estado D. Lorenzo Maxixcatzin Tianquiztlatohuatzin, "Señor del mercado", el cual murió en los reinos de Castilla yendo a besar las manos al Emperador Carlos V y a dalle la obediencia. Por su muerte, y no dejar hijos, le sucedió D. Francisco Maxixcatzin Acuacuatzin y por no dejar hijos el dicho D. Francisco le sucedió D. Juan Maxixcatzin Otzetzehuicatzin, su sobrino, hijo de Ullamanitzin, señor del barrio de Atlamaxac y de una hermana suya, que es en nuestros tiempos.
La cabecera de Quiahuiztlan, llamada Mapitzahuacan, se gobernaba por elección, porque eran muchos señores deudos hijos de hermanos y, por evitar discordias, se elegía por ellos el que los debía gobernar; estos gobiernos eran de por vida. La fundación de este reino y cabecera fue la última de las cuatro de esta ciudad, que fueron los postreros que llegaron y vinieron en demanda de los demás. Se dividieron en dos o tres legiones y cuadrillas después de la gran mortandad y derrota de Poyauhtlan Cohuatlichan. Los más vinieron rodeando el Volcán, como está referido, por TepetIaoztoc, Zacatzontitlan, Teomolixco, Zultepec, Yahualiucan. Mazapan, Quauhtepec, Ocelotepec, hasta que llegaron a esta provincia y poblaron en Quiahuiztlan, do fueron muy bien recibidos de sus deudos. La otra cuadrilla llevó la vía de Tollantzinco, Xilotepec, Tototepec y Pahuatlan, como lo tenemos tratado.
Y tornando a la fundación del señorío de Quiahuiztlan, fue el primer Señor Mizquitl, sucedióle en el gobierno Timaltecuhtli; a éste, Taxcoyohua; a éste, Cohuatzintecuhtli: a éste, Quetzahuitzin; [y a éste] Zacancatzin, el cual fue llevado de la cabecera de Ocotelolco del barrio de Contlantzinco por discordias que los señores ovieron en la cabecera de Quiahuiztlan y, por eso, el dicho Zacancatzin es descendiente de ellos por brazo femenino. Estando por principal y señor de Quiahuiztlan, fue llevado a la cabecera en conformidad de su República y fue señor de ella dos años, y sucedió en el señorío Iyactzin Teohuatecuhtli, que también vivió poco en el gobierno. Por su muerte sucedió Citlalpopocatzin Quetzalcohuatecuhtli, en cuyo tiempo llegó Cortés. Sucedióle Tlaltentzin Temilotzin, a éste, D. Tomás de la Cruz. Y por ser de poco fruto en las ocasiones de aquellos tiempos, eligieron en el mando y gobierno de esta cabecera a D. Julián Motolinia Moquetlacatzin, y por fin y muerte de D. Julián sucedió D. Antonio de Luca Omacatzin. Y por cuya muerte sucedió D. Juan de Mendoza, que actualmente vive, por ser hijo de D. Baltazar Cuauhtecolotl, hijo de D. Julián Motolinia Moquetlacatzin.
Habiendo tratado de las tres cabeceras y de su principio, nos resta decir de la fundación y principio de la cabecera de Tizatlan, casa muy principal de Xicotencatl, amigo leal de los cristianos, aunque es de la cabecera de quien habíamos de tratar antes en este lugar, y es por alargarnos más. Estos caudillos principales y muy señalados bajaron de la cabecera de Tepeticpac y poblaron en un valle y llano llamado Teotlalpan. El primer poblador y fundador de este señorío y casa fue llamado Xacayamachan Tzonpanetepelohuatecuhtli. El cual, estando en su prosperidad, lo mataron por envidia que de él tuvieron, por ser tan bueno y bien quisto, que atraía a sí muchas gentes por su afabilidad, regalos que les hacía y grandes franquezas y liberalidades que usaba con los suyos; y como se iba engrandeciendo con tanto poder, obieron temor de él, no viniese a ser tan poderoso que los supeditase a todos y tiranizase. Estando en quietud, una noche conspiraron contra él y lo mataron, tomando por ocasión que era tirano. Después de muerto le asolaron las casas hasta el suelo, diciendo que se quería alzar con todo el reino de Tlaxcalla y que andaba [a]llegando parcialidades para poner por obra su mal propósito y dar gusto a los ambiciosos, y con este color le ovieron de dar fin y cabo, y en este tiempo.
Por muerte de Xayacamachan se pasó el señorío y se subió al barrio de Tizatlan, sucediendo en el mando de aquella cabecera Zozoxyaotequihua Aquiahuacatl, [a quien] después de sus días, sucedió en el señorío Aztamatlacaxtli Tecuhtli; y de éste sucedió otro Xayacamachan Tlazcaltecuhtli; y de éste, Xicotencatl, hijo de Aztahua, en cuyo tiempo vino el Marqués, y le recibió de paz él y los suyos con muchos regalos y favores que le hizo. Después de muerto, le sucedió Itzehecatzin Teuhtli Piltecuhtli. Aunque obo el dicho Xicotencatl muchos hijos, que dejó en toda Tlaxcalla grande generación, [pues] vivió más de ciento cuarenta años, [y] obo más de cien hijos e hijas y entre ellos muchos y muy valerosos hombres y capitanes. Después de su muerte sucedió Motenehuatzin Tlamacaztecuhtli en el señorío de Tizatlan. Este murió en la guerra de Culhuacan, yendo con Nuño de Guzmán a aquella conquista. Por su muerte, sucedió D. Juan de Vargas Quauhxayacatzin, quedando por tutor D. Luis Xicotencatl, hijo del dicho Motenehuatzin, y por su muerte sucedió D. Juachin de la Cerda y por venir la sucesión por vía transversal, salió a la causa D. Leonardo Xicotencatl, nieto de Itzehecatzin, diciendo pertenecerle a él el señorío por línea recta y derecha sucesión, y no a los herederos de D. Juachin de la Cerda. Hubo entre ellos concierto, [por]que el dicho D. Leonardo Xicotencatl casó con la hija de D. Juachin de la Cerda, llamada Doña Francisca de la Cerda Tehculhuatzin. Y ansí, han sucedido en el Estado de Xicotencatl y lo tienen en nuestros tiempos en gran conformidad de toda su cabecera.